Y estas cosas tiene el fútbol. El dinero y la fama, de repente, a un lado. Poco importan las cosas materiales, sólo dar una mano cuando más lo necesitan. Y es ése el caso de Facundo Parra. Con el descenso de Independiente, en Avellaneda se pedía a gritos el regreso de algún ídolo del último tiempo. Y el 9 los escuchó y retornó a un lugar donde se siente muy querido. "Desde que llegue al país que le comenté a Cantero que quería volver a Independiente", aseguró quien ya jugase con el Rojo 80 partidos (con 23 goles). Y para terminar de confirmar su regreso afirmó: "Por suerte pudimos arreglar y entre este martes o el miércoles a más tardar, pongo el gancho". Una buena entre tantas malas.

El delantero de 28 años fue uno de los protagonistas en la obtención de la Sudamericana 2010 para el conjunto de Avellaneda. Y esa fue una de las razones que lo hicieron inclinar la balanza. "Acá viví la mejor época de mi carrera. Si me pongo a pensar, todo me lleva a Independiente. Esto es algo que quiero hacer", contó en La Red el ex Chacarita (donde debutó, justamente, en B Nacional) y Larissa griego. Y, casi en un tono desesperado e impaciente, anticipó: "Quiero ir a entrenar ya. Firme o no firme me voy a presentar. No quiero perder mas días. Me aburre estar en mi casa, je".

Facundo, tras su primer estancia en el club, se fue a jugar al Atalanta. Casi sin continuidad, jugó tan sólo ocho partidos para los italianos de Bérgamo y convirtió dos goles en la última temporada. Sin embargo, deja todo de lado y vuelve al país para jugar en el Rojo. "Para mi es un desafío personal y profesional. Me juego todo. Vengo a un club que esta en la peor situación de su historia", manifestó. Y le dejó un mensaje a los hinchas: "Juego con la esperanza de la gente por eso tengo que hacer lo mejor que pueda".